La innovación: Una mirada teórica y actual September 3, 2016

La innovación: Una mirada teórica y actual
El concepto

Para Drucker (2002), la mayoría de las innovaciones vienen de un compromiso sistemático por la búsqueda de ideas imaginativas y útiles, así como del propósito consciente de la búsqueda oportunidades dentro de la compañía y la industria. Drucker nos menciona la necesidad en la búsqueda de ideas innovadoras en siete áreas principalmente, entre las que se tienen: La ocurrencia de situaciones inesperadas en las cuales muchas veces se tienen errores que llevan a la creación de innovaciones. Las incongruencias que se ponen en evidencia en la medida que se analicen muy bien los procesos y especialmente los detalles de los mismos, en donde como ejemplo menciona el autor fue el caso de la creación de los contenedores para evitar la pérdida de tiempo en el proceso de carga y descarga de los barcos. Como tercera área están las necesidades de los procesos, como por ejemplo el mantener en el Japón las rutas trazadas siglos atrás, para las rutas actuales de las autopistas. Los cambios en el mercado y en las industrias, en la medida que estas evolucionan se crean alrededor de ellas o por ellas espacios en donde productos o servicios innovadores pueden tener un gran desarrollo. Como quinta área se tiene que los cambios demográficos abren escenarios en los que la innovación puede ser aplicada, pudiendo la creación u optimización de productos, suplir la necesidad expuesta por estos cambios. Los cambios en la percepción son otra área en donde la innovación se puede gestar, por ejemplo, ver las situaciones desde diferentes enfoques puede crear una nueva percepción de la situación facilitando su mejora. Por último, para Drucker está el área para el desarrollo de la innovación, que se basa en el nuevo conocimiento ya sea científico, técnico o social. En el conocimiento aplicado a la realidad o a las necesidades de las comunidades se encuentran grandes posibilidades de innovación.

La innovación ha sido vista a través de los años como la introducción de algo nuevo en el mercado o en un proceso y fue vista desde sus inicios como una característica aplicable a los procesos de producción especialmente (Schumpeter, 1934). Para Canals (1991) no todas las innovaciones tecnológicas tienen el mismo impacto económico y social pues existen innovaciones que pueden ser un nuevo paradigma, como lo sucedido por el invento de la electrónica en donde esta ha modificado diversas áreas de la sociedad en los últimos años, mientras que la biotecnología, que sin duda es muy importante, aún no afecta a grandes sectores de la humanidad.

Cabanelas (1997), nos dice que la manera para afrontar la complejidad de las empresas es través de la innovación, sin embargo, éstas no están preparadas para lo imprevisto y que por ser la empresa una estructura busca preservar su propia estabilidad. Así mismo, Cabanelas propone que la innovación requiere algo de desorden y flexibilidad dejando algún lugar al azar. Innovar menciona el autor, equivale a renovar, es decir cambiar administrando correctamente la información para anticiparnos al futuro. Citando a Jarroson, Cabanelas dice que la empresa debe incorporar un nuevo nivel, una nueva dimensión, la de la mutación, la capacidad de crear y cambiar.

La innovación tiene como prueba crucial crear un flujo de negocios rentable y responder con un alto grado de originalidad a una necesidad (Gelinier, 1989). Gelenier también exhorta a reconocer la importancia fundamental de la investigación científica y técnica en los procesos de innovación, procesos que deben tener la conjunción de varias fuentes como las necesidades, los mercados, las técnicas y los procesos. De esta conjunción, destaca el autor, pueden salir conceptos de productos o procesos que pueden ser la base de un nuevo campo. Para Gelenier, toda innovación procede de un esfuerzo y de la audacia de salir de los marcos establecidos, así como debe alentar a las iniciativas siendo esto una característica de los directivos eficaces. Siendo entonces la innovación una característica que no surge de la espontaneidad, sino una que nace en un terreno sembrado y fertilizado por bastante información técnico científica que aporta datos para que esta germine.

La innovación se ha visto desde diversos enfoques en lo teórico pero el que ha tenido más reconocimiento y encontrado más consenso en la práctica, es el que se le ha dado desde la OCDE y la oficina de estadística de las comunidades europeas –Eurostat-, estas dos instituciones han desarrollado lo que se conoce como el manual de Oslo, el cual en un documento guía de cómo debe ser entendida la innovación y cómo deber ser medida y diagnosticada. Según el manual de Oslo (2005) nuestra comprensión acerca de las actividades de innovación y su impacto económico ha aumentado, pero no de manera suficiente y esta debe der vista desde una mirada distinta a la de la investigación y el desarrollo.

El manual de Oslo nos ofrece una definición de innovación, entendida por estos como la introducción de un nuevo, o significativamente mejorado, producto (bien o servicio), de un proceso, de un método de comercialización o de un nuevo método organizativo y aclaran la palabra introducción refiriéndola a que para que se tenga innovación esta debió haberse lanzado al mercado o introducido en el marco de operaciones de la empresa.

Guardando línea con lo expuesto por el manual de Oslo, la Asociación Española para la Normalización y Certificación –AENOR- (2006) en su norma 166002 menciona que la innovación es un factor complejo y crítico para determinar el crecimiento económico de las naciones y establece la competitividad de un país, siendo su estudio adecuado y la apropiación de esta por las empresas una necesidad estratégica de inmediata adopción. La AENOR subraya que la innovación, desde un enfoque de innovación tecnológica, se basa en la investigación y desarrollo, pero no se limita a estos y que para su apropiada gestión es necesario establecerla como proceso, documentarla y normalizarla.

Chesbrough (2006), complementa la discusión acerca de la innovación introduciendo el concepto de innovación abierta, proceso en el cual se desarrollan nuevos productos, procesos y/o servicios, no solo desde el interior de una organización o empresa sino con la participación constante de actores fuera de ella, innovaciones que pueden ser para el bienestar de la misma empresa, otras empresas e inclusive otros mercados. Para la fundación COTEC (2006), hablar de innovación se refiere fundamentalmente a hablar de la innovación en la empresa y en concreto a los cambios que generan valor propiciados por ella y basados en el conocimiento. Para COTEC agregar valor es la meta, si esta no se logra quizá puede hablarse de haber realizado actividades innovadoras, pero nunca de innovación.

Morcillo (1997), menciona que innovar consiste en aportar algo nuevo y aún desconocido en un determinado contexto, la innovación es una idea que se vende, queriendo resaltar el carácter comercial de la innovación y haciendo distinción en que un invento, una idea o un descubrimiento son innovación en el momento que se les encuentra utilidad y dan respuesta a una necesidad. Para Kuczmarski (1997), la innovación es una ruta aceptable y deseada para crecer dejando de ser una ciencia y convirtiéndose en un arte, arte que solo se puede dar por terminado cuando ha sido lanzado al mercado y ha logrado la aceptación de los clientes con base en sus propios criterios. Alonso y Méndez (2000), definen a la innovación como algún tipo de cambio o mejora que se introduce en el funcionamiento del sistema productivo y permite el aumento de la eficiencia, la calidad o la rapidez, y en general representa un mejor desarrollo cuantitativo o cualitativo de las fuerzas productivas. Complementando al tema, la innovación para Christensen, Gregersen y Dyer (2012) es una tarea de todas las áreas de las compañías y de todos los funcionarios de la misma, que da valor a la empresa, pues ésta se da en cualquier actividad de una organización bien sea en los procesos, en las personas, en los productos y/o servicios, en el modelo de negocio o en la organización en sí misma.

Para el estado colombiano citado por el Consejo Privado de Competitividad (2013), la Innovación es la asimilación y explotación exitosa de una novedad, en las esferas económica y social, de forma que aporte soluciones nuevas a los problemas nacionales y regionales y permita así responder a las necesidades de la sociedad y el sector productivo. La innovación tiene como objetivo el promover el emprendimiento y fortalecer los centros de investigación y desarrollo, presidente Juan Manuel Santos Calderón citado en el informe nacional de competitividad (2014).

La tabla siguiente tabla, presenta una síntesis del significado de la innovación para los autores consultados en el presente trabajo de investigación tutelada.

Autor

Tabla: El concepto de innovación: Elaboración del autor

Una vez realizada la revisión del término innovación a través de este documento, se entiende para este trabajo a la innovación como un proceso que aplicado de manera constante y desde una perspectiva sistémica busca la mejora significativa[1] o la creación[2] de un modelo de negocio, un proceso, un producto o la forma como se administra una organización. Mejoras o creaciones soportadas o no con las tecnologías de la información y comunicaciones –TIC- y que desde un enfoque estratégico traen beneficios a alguno de los actores de la cadena de valor de la empresa, haciéndola más competitiva. Entendiendo por actores de la cadena de valor y desde un enfoque endógeno a clientes, empleados y propietarios de la empresa y desde uno exógeno a proveedores, estado, mercados y medio ambiente, entre otros. El sentido de proceso que se le da a la innovación busca que esta sea vista y realizada por las organizaciones de forma metódica y no espontánea y el carácter de estratégico busca que al iniciar procesos de innovación se tengan claramente definidas sus características estratégicas que incluyen su seguimiento, control, medición, objetivos y recursos, entre otros

Tipologías de la innovación 

Para Hamel (2009), existen cuatro tipos de innovaciones: la operativa, la de productos y/o servicios, la estratégica y la administrativa, que si estuvieran en una pirámide en donde cada una ocupara un escalafón, la administrativa sería la más importante pues es la que más valor le agrega a una organización. Para Gary Hamel la innovación administrativa es cualquier cosa que modifique significativamente la manera como se administra o que modifique ostensiblemente las formas habituales de la organización y con ella se promuevan los fines de la empresa.

Por otro lado, para Davila, Eptein y Sheldon (2013), existen dos tipos de innovación principalmente, innovación en el modelo de negocio e innovación tecnológica, encontrando en la primera subdominios como: innovación en la propuesta de valor, en la cadena de valor y orientadas al cliente y teniendo para el segundo tipo subdominios como: innovación de productos y servicios, procesos tecnológicos y en tecnologías posibilitadoras.

Para la fundación COTEC (2006), la innovación tiene tres ejes que la sustentan: el valor como su meta, el cambio como su vía y la aplicación del conocimiento su desarrollo y la clasifica como innovaciones tecnológicas, cuyo agente movilizador son las TIC y organizativas o comerciales que tienen impacto en la estructura de las organizaciones o en su modelo de negocio.

En las primeras versiones del manual de Oslo se veía a la innovación desde una perspectiva tecnológica y de producto, sin embargo, con el paso del tiempo y con base en estudios en organizaciones de diferentes regiones del planeta, se determinó que los dos primeros enfoques para la innovación no eran suficientes para entenderla y que la innovación se debería caracterizar desde las tipologías de producto, procesos, organizaciones y mercadotecnia. Así mismo nos menciona el manual, que la innovación puede estar presente en diferentes sectores de la economía, tales como: público, privado, servicios, producción, etc. De acuerdo con el manual de Oslo y las tipologías mencionadas, cada tipo de innovación debe ser entendida de acuerdo con la ilustración n. 4:

Ilustración: Tipos de innovación – Manual de Oslo: Ilustración del autor

Para el Foro Económico Mundial (2013), las innovaciones deben verse desde dos ópticas principalmente, la innovación no tecnológica y la innovación tecnológica. La primera hace referencia a la sofisticación de las prácticas para la producción de bienes y servicios, la sofisticación en el mercadeo, la fuerza de las marcas y los esfuerzos orientados al mejoramiento de los procesos de distribución y de producción, todos estos aspectos que hacen relación cercana con el conocimiento dentro de la empresa, las habilidades de la empresa y sus funcionarios y las condiciones de trabajo en general. La segunda óptica propuesta por el FEM para estudiar la innovación es la innovación tecnológica, en donde con base en procesos de tecnología se mejoran actividades en general de la empresa, actividades que pueden orientarse hacia cualquier área de la organización.

Hasta el momento se ha presentado en este capítulo el concepto de innovación y sus tipos, pero estos dos enfoques de la innovación no son suficientes para lograr su entendimiento. Schumpeter citado por Fernández (1996) ofrece otra perspectiva de la innovación y es la que se basa en su impacto, es así que caracteriza la innovación como radical cuando su impacto en la función de la producción constituye un cambio histórico en la manera de hacer las cosas. Según Fernández las innovaciones por otro lado pueden ser incrementales y constituyen mejoras que se realizan sobre lo existente y que son aportadas no solo por la empresa innovadora, sino por competidores y mercados.

Por su parte Dávila, Epstein y Shelton (2013), le aportan al tema de la clasificación de la innovación por su impacto con tres tipos, que son: La innovación incremental, semi radical, y radical. Teniendo como innovación incremental a aquellas mejoras que se agregan a los productos y procesos existentes y que tienen como objetivo claro la resolución de un problema, sacándole el máximo valor posible a los productos o servicios existentes. La innovación semi radical dicen los autores, puede realizar cambios importantes en el entorno competitivo y supone cambios sustanciales en el modelo de negocio, en el producto o en los procesos, pero no en todos. La innovación radical resulta en nuevos productos o servicios que son introducidos en los mercados y genera un cambio simultáneo en el modelo de negocio y en la tecnología de la empresa, este tipo de innovación suele traer cambios fundamentales en el entorno competitivo de un sector y puede generar disrupción en algunos productos o mercados. Citan como ejemplo clásico los autores, la introducción de los pañales desechables al mercado, situación que en los años 70 generó disrupción cambiando desde ese entonces la manera de asear a los recién nacidos.

La siguiente tabla, presenta una síntesis acerca de los tipos de innovación desde los enfoques presentados en este capítulo

Tabla: Tipos de innovación: Elaboración del autor

[1] Innovación incremental

[2] Innovación radical